La Historia de Momentos de Tranquilidad
Gratitud y agradecimiento
Mi papá me ha dicho muchas veces:
“Una de las virtudes más importantes del ser humano es la gratitud. Debemos saber agradecer.”
Lo recuerdo diciéndolo en la carretera cuando éramos niños, como parte de un regaño por alguna travesura, o en una peda, emocionado al contar parte de su historia.
Aun así, lo comprendí hasta mis 28 años.
Me tomó tanto tiempo por vivir distraído de mi propia vida. Ahora sé que la atención crea la perspectiva, que genera la distancia crítica que hace del agradecimiento una certeza.
El escrito de hoy es diferente. Hoy escribo para agradecer.
Agradezco a algunas de las personas más influyentes en la historia y evolución de Momentos de Tranquilidad. Lo hago para recordarme que nada que vale la pena se construye solo.
Y con mucho entusiasmo te comparto esta conversación abierta, honesta y transparente con mi gran hermano, Javier Morodo. Escucharás la historia de Momentos de Tranquilidad, que en realidad es mi historia y mi camino.
Javier y yo somos dos hermanos que se encontraron en el camino y nos comprometimos a volar a la libertad. Hemos sido los guardianes de nuestros actos de coraje, en los que nos elegimos a nosotros mismos, impulsando nuestra evolución y forjando una hermandad inquebrantable para comprender que lo más importante no es el destino ni el camino, sino quién te acompaña.
Es real que cuando uno sabe a dónde va, el universo conspira para dejarlo pasar. Quita obstáculos, abre puertas y caminos para encontrarnos con hermanos sembradores de verdad, coraje e inspiración.
Mi admiración, respeto y gratitud a cada uno de ustedes por ayudarme a sembrar las profundas raíces de este camino.
Probablemente uno de ellos es el maestro que estas buscando. En orden de aparición:
Eric Castro: Gran hermano, valoro profundamente la elegancia y generosidad con la que me compartes la sabiduría milenaria de tu experiencia de vida. Be a Buffalo.
Claudio Schlegel: Admiro tu talento para identificar y compartir oportunidades de inversión, sobre todo en las que apostamos por nosotros mismos.
Oso Trava: Gracias por confiar en ti y empezar Cracks Podcast. Con admiración y respeto, reconozco a Cracks Mastermind como una de las mejores y más importantes decisiones de mi vida.
José Casas: Agradezco enormemente nuestra llamada 1.47 horas. Hay un antes y después.
Arturo Lomelí: Gracias gran hermano, por recordarme que somos los guardianes de nuestra propia evolución y que el verdadero maestro es uno mismo. Gracias por la inspiración, la sabiduría y el máximo placer de acompañarnos en el camino. Somos del tamaño de nuestros sueños, pero nos convertimos en lo que hacemos. Be a Buddha.
José Arce: Shifu, mi gratitud contigo por hacerme las preguntas en las que pude comprender(me), perdonar(me) y aceptar(me).
Tuti Sánchez: Reconozco tu valentía para destruirte y reconstruirte. Gracias por confiar en mí y acompañarme al inicio de mi paternidad en el Amazonas.
Daniel Marcos: Fuiste clave para descubrir el propósito de Metrópoli y hacer juntos de Momentos de Tranquilidad un vehículo de contribución para la mentalidad de la empresa.
Raúl Romero: Gracias, gran hermano Zorro, por comprometerme con esta práctica. Admiro profundamente la sabiduría sobre la que vuela tu maestría. Hermanos somos, y en el vuelo nos encontramos…
Humberto Herrera: Ya lo sabes. Gracias por tu mensaje de poder: “Your calling is like an underground river, if you don’t let it flow, it will fuck you up.”
Javier Morodo: Gracias, gran hermano águila, por tanto y por todo lo dicho y no dicho. Por aventarme al vacío para atreverme a confiar en mí, abrir las alas y ser un hombre que se alza a volar en libertad.
Paty Kuri: Me inspiraste a elevar el tamaño y la seriedad de mis compromisos con tu historia. La confianza no está en la rama, sino en las alas.
Ana Alanis: Aprecio enormemente tu paciencia, disponibilidad y generosidad para afinar mi pluma.
Pepe Ramos: Te admiro, te quiero y te agradezco por revelarme que mi mayor fortaleza es ser yo mismo. Gracias por guiarme en mi liberación y mi rena-ser frente a mi padre y mis hermanos.
Sagrario Miranda: Gracias, gran hermana, por iluminar el camino para disolver el miedo a ser papá. Mateo, Karla y yo te agradecemos siempre.
Paola Ambrosi: El camino propio se elige paso a paso.
Don José Campos: Admiro y agradezco la entrega de un corazón con el propósito de hacer de esta tierra un mejor lugar para experimentar la vida humana. Gracias por recordarme que se empieza por la familia.
Alfonso Ruiz Soto: Tus enseñanzas siguen y seguirán transformando mi vida. Gracias por la inspiración interminable.
Búho: Celebro tu loca y profunda sabiduría. Gracias por ayudarme a recordar, a romper el cascarón y nacer en mí mismo. Gracias por el Gran Mecanismo. Gracias por Búho. Gracias por tu palabra y por las historias míticas, heroicas y mitológicas. El mundo te agradece.
Daniel Ruiz: Somos los marineros de la fuerza y comandantes del navío en el mar de nuestra evolución. Gracias, hermano Ruizseñor.
Manolo y Mario Guillén: Más que hermanos de sangre, somos hermanos en el camino de la mente al corazón.
A mis papás: Por la vida y la experiencia humana. Por la libertad de contar mi historia. Por aceptar, respetar y apoyarme en mi camino. Por el trabajo que hoy hace esta familia.
Gracias de nuevo a Javier por siempre impulsarme en dirección a todo lo que me da miedo. Te admiro y te agradezco por permitirme vivir desde primera fila tu gran transformación. Eres una fuente de inspiración, coraje y disciplina. Te amo, hermano.
Y, sobre todo, gracias a mi familia, Karla y Mateo. Mi amor por ustedes es la fuerza del espíritu que me sostiene en los actos de coraje del camino más difícil para el hombre: el camino de la mente al corazón.
Gracias a cada hermano, conocido y por conocer, que me ha acompañado con apertura y receptividad. Gracias por compartir de boca en boca y por dedicar su tiempo y atención a esta práctica, que nació en mi corazón y ahora es un movimiento llamado Momentos de Tranquilidad.
Quien comparte está en la abundancia…
Si te aportamos algo de valor, compártelo intencionalmente y se el puente de conexión con tus hermanos de camino.
Something to think about…
Somos perfectos, pero no estamos terminados.
Te amamos profundamente! Gracias!! Gracias gracias 🤍
El gran acto de coraje es compartirnos, hermano. Bien decía la sabia tortuga de los Galápagos, “hay que agradecer”. Y cuando agradeces, te Agrada Ser. Yo también te agradezco, Halcón, por tu presencia estimulante y amorosa en mi vida. ¡Que cada momento sea un momento de tranquilidad! 🦉🙌🏼🪶