3 minutos de Tranquilidad. Estoy en un lugar remoto en Canadá y no pude grabar audio.
Paciencia: Testimonio de Amor
“El mayor testimonio de amor a un hijo es la paciencia”, nos dijo el Dr. Alfonso Ruiz Soto en una mesa familiar.
En el séptimo mes de embarazo, nos entregó una semilla que se convirtió en el puente de mi vínculo con mi hijo. Sentí la profundidad de su mensaje vibrar y tocar el futuro cercano.
Una herramienta nueva ante un cambio impredecible e inconcebible. Ser intencionalmente paciente trazaría el camino para mi familia.
Paciencia al hijo que nace. Paciencia a la madre que nace. Paciencia al padre que nace. Paciencia a la familia que nace.
Paciencia como antídoto para los que vivimos con prisa interna y olvidamos que no se puede volar en las falsas alas de la prisa.
No terminamos de llegar a un lugar y nuestra mente ya piensa en el siguiente. Escribimos un mail tecleando a máxima velocidad, aguantando la respiración para pasar al siguiente, al siguiente y al siguiente en el rat race infinito.
Despertamos con prisa. Vivimos con prisa. Dormimos con prisa.
Paciencia para parar, valorar y realmente vivir el momento en el que tengo en mis brazos a mi bebé sin distraerme con el celular o pensando en algo más.
Entregarme intencionalmente a esta etapa, que será un destello en la historia de su vida. Vivir la experiencia completa: pañales, baños, desvelos, mamilas, cambios de ropa, ejercicios, y agendando y respetando intencionalmente nuestro tiempo juntos.
La paciencia me dio la fuerza para regresar al centro en las noches de desesperación y llantos, sin dormir tres horas seguidas por meses. Apoyando, comprendiendo y reconociendo, en la tormenta del nacimiento familiar, hasta las eternas cenas en las que la comida es un objeto que termina en el piso.
La paciencia es una fuerza que rompe con lo aparentemente duro y rígido para dar paso a lo realmente fuerte y flexible. Nos permite aceptar, en lugar de rechazar el momento presente y no entrar en un conflicto con la realidad.
Ser intencionalmente paciente me abrió la puerta de la experiencia para entender mi rol de padre como un eterno aprendiz.
Hoy tomo muchas decisiones considerando el tiempo que dejaría de pasar con mi hijo. ¿Cuánto tiempo con él tengo que pagar por vivir esta experiencia, proyecto o negocio?
Además, si regresamos al origen, la naturaleza contiene todas las enseñanzas: la semilla no duda del fruto que puede dar.
La semilla descansa en la sabiduría del tiempo.
El hombre duda porque olvida que, con el pasar del tiempo, cada una de las estaciones trae consigo su propia belleza y sabiduría.
La paciencia es presencia. La paciencia es confianza. La paciencia es certeza.
Es muy fácil darnos cuenta. Todo aquello que no podemos observar, descubrir y describir, y reaccionamos con prisa e intolerancia, nos enseña a ser pacientes y tolerantes.
“El mayor testimonio de amor a un hijo es la paciencia.”
Me repito el mensaje desde que nació. Es un mantra que ahora llevo de la paternidad a una sala de juntas, a un proyecto, a cualquier situación de la vida cotidiana.
La paciencia es un músculo y un hábito, y el conteo inicia en cero todos los días.
Libro: Riqueza 360 por Javier Morodo
Mi gran hermano,
, publicó su primer libro “Riqueza 360”.No es un manual para hacer dinero, es una invitación a rediseñar tu vida desde el origen: salud, paz mental, libertad, relaciones, propósito.
Nos enseñaron que riqueza era tener, pero Javier nos lleva a recordar que la verdadera riqueza es ser.
Ser tú, ser libre, ser pleno.
Es un libro que pone sobre la mesa preguntas que vale la pena sentarse a responder sin prisa. Y si estás en ese punto en el que quieres construir una vida bajo tus propios términos, empieza por aquí.
Gracias por compartir, es un muy buen día para trabajar la paciencia con mis hijos y a mi alrededor.
Que bonitas reflexiones siempre, la mejor manera de empezar el fin de semana siempre!