⏳ 4 minutos de tranquilidad
🔮 De la Envidia a la Inspiración
Llegamos a la adolescencia y salimos al mundo siendo ciegos de nuestra propia inmadurez al vivir muchas aventuras por primera vez, que retan la solidez de nuestras creencias, ideales y valores.
Salimos en busca de aventuras que nos ayuden a descubrir nuestro lugar en el mundo. A todo decimos que sí, creyendo que tenemos todo bajo control. Siempre con la frágil certeza de no caer en la presión social de hacer cosas que al día siguiente nos garantizan una audiencia con el juez más severo de todos, el juez interno.
El primer ligue, la primera peda, el primer puente en Acapulco con amigos sin papás, pasar como estrella de cine la cadena del Alebrije o del Baby, la mesa al lado de la pista para marcar territorio en el antro y sentirnos admirados por las mujeres y envidiados por los otros hombres.
Según yo, éramos la envidia de los demás y con el tiempo entendí que era una batalla y competencia constante en la que nadie gana. ¿El logo de la marca de mi playera me abraza lo suficiente y me recuerda lo que valgo? ¿Tengo la mesa con más champañas y pomos en el antro?
Atravesamos la semana en piloto automático y esperamos al jueves para que se repita la misma historia. Y esa competencia con el que trae un reloj más caro, un mejor coche, una novia trofeo, una casa más grande, una empresa más rentable, un apellido de nobleza, etc., se transforma en envidia y la envidia es el veneno más poderoso de todos.
Ese veneno nos vuelve miserables. Buscamos todo en el exterior y olvidamos que el camino a la verdadera libertad está en el camino hacia dentro del alma.
Y la envidia es un producto de nuestra imaginación que tiene mucho que decirnos sobre lo que inconscientemente nos hace falta trabajar.
Naval Ravikant, inversionista y filósofo moderno, lo explica muy bien.
Envy is an illusion.
The part of the person that we envy doesn’t exist without the rest of that person.
If we aren’t willing to trade places with them completely - their life, their body, their thoughts - then there is nothing to be envious about.
Podemos envidiar el dinero, la empresa, la marca, los followers o la riqueza de alguien más, pero tendríamos que envidiar sus problemas y todo lo que tuvo que trabajar o sacrificar para conseguirlo.
Y no olvidar que también debes envidiar su infancia y lo que vivió en ella, a sus padres, a su pareja, a sus amigos, sus valores y motivaciones, sus miedos e inseguridades, sus pensamientos y su juez interno, y todo lo que siente y se manifiesta cuando se mira en el espejo y se pregunta ¿soy un buen ser humano?
No podemos envidiar una parte específica sin envidiar todo lo que hizo que esa parte sea lo que nosotros creemos que es. No podemos tomar una parte del otro creyendo que eso nos va a dar lo que tanto estamos buscando; no funciona de esa manera.
Tendríamos que hacer un intercambio completo. Su cuerpo por el tuyo, su mentalidad por la tuya, su familia por la tuya, su infancia por la tuya, su definición de éxito por la tuya y su amor propio y autoestima por el tuyo.
¿De qué sirve un motor de Ferrari en un BMW si no tiene los frenos, la aerodinámica, las llantas y no es compatible con el chasis del coche? ¿De qué sirve que envidiemos lo que creemos es lo más destacado del otro si dentro de nosotros no cabe, no va y no es?
El poderoso veneno de la envidia nos apendeja y, como zombies, nos olvidamos de que muchas veces lo que buscamos es una distracción. Quiero esto que la sociedad valora para que la sociedad piense que soy muy chingón.
Cuando nos preguntamos si estaríamos dispuestos a cambiar nuestros problemas, sueños, hijos, familia, amigos y nuestra vida por la del otro, el veneno desaparece y, mucho más importante, se manifiesta un momento de resignificación importantísimo: la envidia y la competencia se transforman en inspiración.
Esta hermosa perspectiva nació en una conversación con José Arce. Cuando vemos a una persona, empresa, marca o un proyecto que ya llegó a un lugar que se asemeja al que yo todavía no he podido llegar o que están logrando cosas que yo no he podido lograr, no siento envidia ni me comparo, no son mi competencia, son una fuente que me llena de inspiración.
No hay competencia, envidia o comparación, hay inspiración.
Esa inspiración es genuina porque nace de ver y celebrar los logros del otro y transformarlos en una posibilidad en el andar de mi camino.
La inspiración es gasolina que me lleva de vuelta al origen, al propósito y a la intención inicial de por qué estoy decidiendo crear y construir ese proyecto, esa comunidad, esa empresa, esa marca, etc.
No importa los colores, texturas y cambios en la forma en la que se materialice esa creación. Lo que importa es que esté alineada al propósito que la vio nacer porque eso viene de nosotros, es personalísimo y solo así, nos reconecta con nosotros mismos para seguir inspirándonos en las distintas versiones y lugares a los que nos lleve esa creación.
Cuando sustituimos el filtro de la competencia y percibimos la realidad desde el filtro de la inspiración, cualquier suceso se puede ver con la curiosidad que nos alimenta para guiarnos en dirección a un mejor lugar del que estamos ahora.
¿A qué nivel te puede inspirar aquélla persona, empresa o marca que tuviste en mente al leer este Momento de Tranquilidad?
🪶🧙🏼♂️
💭 Something to think about
Potential is not a matter of where you start, but of how far you travel. We need to focus less on starting points and more on distance traveled.
- Adam Grant (Hidden Potential: The Science of Achieving Greater Things)
🚀 How To Take Charge Of Your Life - Jim Rohn
Jim Rohn es una de los pioneros de la industria del desarrollo personal. Fue uno de los mentores de Tony Robbins.
Este seminario es uno de los mejores videos donde comparte tantos aprendizajes que es necesario irlos integrando poco a poco para poder verlos reflejados en nuestras acciones de todos los días.
Su habilidad para comunicar ideas tan profundas de maneras tan simples, es una inspiración.
Volví a escucharlo hace unos días y cada que lo escuchó me llevo algo diferente.
The great challenge in life is that you can have more han you’ve got, because you can become more than you are. The other way around; unless you change what you are, you’ll always have what you got.
Por más inspiración encontrada y envidia erradicada!! tu eres inspiración Miguel! Abrazo!!!
❤️❤️❤️